Janucá, también conocida como la Fiesta de las Luces, se celebrará del 25 de diciembre al 2 de enero. Esta festividad conmemora la reedificación del Segundo Templo de Jerusalem y la victoria de los Macabeos sobre el Imperio seléucida en el siglo II a.C. El nombre Janucá proviene del hebreo y significa “dedicación”, en alusión a la purificación y re-consagración del Templo después de años de profanación.

Según la tradición, cuando los Macabeos lograron liberar el Templo, encontraron una única vasija de aceite puro para encender la Menorá, el candelabro sagrado. Aunque el aceite era suficiente solo para un día, milagrosamente duró ocho días completos, el tiempo necesario para preparar más aceite puro. En conmemoración de este milagro, celebramos Janucá durante ocho noches encendiendo la Janukiá, un candelabro de nueve brazos.

Tradiciones de Janucá
La festividad es un tiempo de alegría, reflexión y unión familiar. Algunas de las costumbres más importantes incluyen:

1. Encender la Janukiá: Cada noche se enciende una vela adicional, comenzando con una el primer día y culminando con las ocho velas encendidas en la última noche. La novena vela, llamada shamash (servidor), es la que se utiliza para encender las demás. La Janukiá suele colocarse en ventanas o puertas para compartir la luz y recordar el milagro.
2. Comer alimentos fritos: El aceite es un símbolo central de Janucá, por lo que los platillos tradicionales incluyen alimentos fritos. Entre los más populares se encuentran los latkes (tortitas de papa) y las sufganiyot (donas rellenas de mermelada o chocolate).
3. Jugar con el dreidel: El dreidel es una pequeña perinola con letras hebreas (Nun, Guimel, Hei y Shin), que representan la frase “Nes Gadol Hayá Sham” (“Un gran milagro ocurrió allí”). En Israel, la letra Shin se sustituye por Peh para significar “aquí”.
4. Dar regalos y gelt: Es costumbre dar monedas de chocolate o dinero (gelt) a los niños como parte de la celebración.

Janucá es una festividad que une a las familias y a la comunidad en torno a valores universales: la esperanza, la fe y la resistencia frente a la adversidad. Es un momento para recordar que incluso en los tiempos más oscuros, un pequeño destello de luz puede crecer y transformar el mundo.

¡Janucá Sameaj!